Los gandules, también conocidos como guisantes de palo o frijoles de palo, son una leguminosa popular en la cocina caribeña y latinoamericana. Además de ser un ingrediente versátil y delicioso, los gandules ofrecen numerosos beneficios para la salud gracias a su perfil nutricional rico en proteínas, fibra, vitaminas y minerales esenciales. A continuación, exploramos algunas de las ventajas más destacadas de incorporar gandules en la dieta diaria.
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1. Fuente rica en proteínas vegetales
Los gandules son una excelente fuente de proteínas de origen vegetal, con aproximadamente 11 gramos por cada 100 gramos cocidos. Esto los convierte en una opción ideal para vegetarianos, veganos y cualquier persona que busque reducir el consumo de carne sin comprometer la ingesta proteica. Las proteínas son esenciales para la reparación y el crecimiento muscular, así como para el buen funcionamiento del sistema inmunológico.
2. Alto contenido de fibra
Con unos 15 gramos de fibra por cada 100 gramos, los gandules favorecen la salud digestiva al prevenir el estreñimiento y promover el tránsito intestinal. La fibra también contribuye a mantener niveles estables de azúcar en la sangre, lo cual es beneficioso para personas con diabetes tipo 2. Además, una dieta rica en fibra puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas al disminuir los niveles de colesterol LDL (el colesterol «malo»).
3. Ricos en minerales y vitaminas
Los gandules contienen hierro, magnesio, potasio y zinc, minerales esenciales para la producción de energía, la salud ósea y la función inmunológica. También aportan vitaminas del complejo B, como la tiamina y el folato, que son cruciales para el metabolismo y la salud del sistema nervioso.
4. Propiedades antioxidantes
Los compuestos fenólicos presentes en los gandules actúan como antioxidantes, ayudando a combatir el estrés oxidativo y reduciendo el riesgo de enfermedades crónicas como el cáncer y la hipertensión.
5. Ayudan a controlar el peso
La combinación de proteínas y fibra en los gandules proporciona una sensación prolongada de saciedad, lo que puede ayudar a reducir el consumo calórico total y apoyar los esfuerzos para controlar el peso.
Incluir gandules en la dieta, ya sea en sopas, guisos o arroces, es una forma deliciosa y nutritiva de aprovechar todos estos beneficios.