Pastel salado de calabacín y parmesano

Este pastel salado de calabacín y parmesano es un plato delicioso y satisfactorio, perfecto para cualquier comida. Esta receta, que combina verduras frescas con queso cremoso y un toque dulce, crea un pastel sabroso, húmedo y aromático. Ideal para el desayuno, el brunch o una cena ligera, este pastel seguramente se convertirá en uno de los favoritos de su hogar.

Tiempo de preparación:

Tiempo de preparación: 20 minutos
Tiempo de cocción: 40-45 minutos
Tiempo total: 1 hora 5 minutos
Ingredientes:

2 calabacines rallados
Sal al gusto
Pimienta negra al gusto
Aceite de oliva virgen extra, según necesidad
4 huevos
1 cucharada de azúcar
100 ml de leche (aproximadamente 1/2 taza)
60 ml de aceite de oliva virgen extra (aproximadamente 1/4 de taza)
120 g de harina (aproximadamente 1 taza)
11 g de levadura en polvo (aproximadamente 1 cucharada)
1 papa mediana, rallada
1 cebolla pequeña picada
30 g de queso parmesano rallado (aproximadamente 1/4 taza)
50 g de queso fresco untable (aproximadamente 1/4 de taza)
50 g de queso parmesano rallado (aproximadamente 1/2 taza)
Instrucciones:

Preparar las verduras:
Rallar los calabacines y la patata mediana.
Picar la cebolla pequeña.
Calentamos una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra.
Añade los calabacines rallados, sazona con sal y pimienta negra y deja cocinar a fuego lento durante 2 minutos.
Preparar la masa:
En un tazón grande, bata 4 huevos con una cucharada de azúcar hasta que estén bien combinados.
Añadimos 100 ml de leche y 60 ml de aceite de oliva virgen extra y mezclamos bien.
Añade poco a poco 120 g de harina y 11 g de levadura en polvo, revolviendo para combinar.
Combine los ingredientes:
Incorporar a la masa la patata rallada, la cebolla picada, los calabacines cocidos y 30 g de queso parmesano rallado.
Mezclar hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.
Prepárese para hornear:
Precalentar el horno a 180°C (350°F).
Engrasa una fuente de horno con aceite de oliva virgen extra.
Vierta la masa en el plato preparado.
Repartir uniformemente por encima 50 g de queso fresco untable.
Espolvorear con 50 g de queso parmesano rallado.
Hornear:
Hornee en el horno precalentado durante 40-45 minutos, o hasta que el pastel esté dorado y un palillo insertado en el centro salga limpio.
Dejar enfriar y servir:
Deje que el pastel se enfríe un poco antes de cortarlo.
Servir caliente o a temperatura ambiente.
Sugerencias para servir:

Sirva con una ensalada para una comida completa.
Combínalo con un plato de sopa para una cena reconfortante.
Disfrútelo con una cucharada de crema agria o una pizca de hierbas frescas.
Consejos de cocina:

Asegúrese de que las verduras estén bien escurridas para evitar el exceso de humedad en el pastel.
Utilice parmesano recién rallado para obtener el mejor sabor.
Deje que el pastel se enfríe un poco antes de cortarlo para ayudar a que se asiente correctamente.
Beneficios nutricionales:

Rico en proteínas procedentes de los huevos y el queso.
Alto contenido en vitaminas y minerales procedentes de las verduras.
Contiene grasas saludables del aceite de oliva.
Aporta fibra procedente del calabacín y la patata.
Información dietética:

Apto para vegetarianos.
Se puede preparar sin gluten sustituyendo la harina por una alternativa sin gluten.
Contiene lácteos y huevos.
Información nutricional (por porción):

Calorías: 280
Proteína: 10g
Grasa: 18g
Carbohidratos: 20g
Fibra: 3g
Almacenamiento:

Guarde las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 3 días.
Recalentar en el horno o microondas antes de servir.
Se puede congelar hasta 2 meses; descongelar y recalentar antes de servir.
Por qué te encantará esta receta:

Es fácil de hacer y está lleno de sabores sabrosos.
La combinación de calabacín y queso es deliciosamente satisfactoria.
Perfecto para cualquier comida y adaptable a diversas ocasiones.
Nutritivo y repleto de verduras.
Conclusión: Este pastel salado de calabacín y parmesano es un plato versátil y sabroso que se convertirá rápidamente en un básico en tu cocina. Su combinación de verduras frescas, queso cremoso y un toque dulce lo convierte en una opción deliciosa para el desayuno, el brunch o la cena. Disfruta de este pastel salado y fácil de preparar con tu familia y amigos. ¡Buen provecho!

Preguntas frecuentes
¿Puedo usar un tipo de queso diferente? Sí, puedes usar tu queso favorito o una mezcla de quesos para lograr diferentes sabores.
¿Puedo preparar este pastel con anticipación? Sí, puedes prepararlo con anticipación y guardarlo en el refrigerador. Vuelve a calentarlo antes de servirlo.
¿Qué puedo utilizar en lugar de calabacines? Puedes sustituir los calabacines por calabaza amarilla o una mezcla de otras verduras.
¿Cómo conservo las sobras? Guárdelas en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días.
¿Puedo congelar el pastel? Sí, el pastel se puede congelar hasta por 2 meses. Descongélelo y caliéntelo antes de servirlo.
¿Esta receta no contiene gluten? Utilice harina sin gluten para que esta receta no contenga gluten.
¿Puedo agregar otras verduras a la masa? Sí, puedes agregar verduras como pimientos morrones, espinacas o champiñones.
¿Cómo me aseguro de que el pastel se mantenga húmedo? Asegúrese de que las verduras no estén demasiado cocidas y agregue suficiente aceite y leche a la masa.
¿Con qué puedo acompañar este pastel? Combina bien con ensaladas, sopas o como refrigerio independiente.
¿Cómo puedo preparar esta receta sin lácteos? Utilice quesos y alternativas a la leche sin lácteos para adaptar esta receta a una dieta sin lácteos.